Gran selección de alimentos especiales y duraderos como comida de exterior, raciones de emergencia y como precaución ante apagones y posibles crisis .
Desastres naturales: inundaciones, terremotos, huracanes y otros desastres naturales pueden provocar una escasez repentina de suministro. Un suministro de emergencia garantiza suministros básicos cuando ocurren tales eventos.
Cortes de energía: Los cortes de energía prolongados pueden afectar el suministro de alimentos y agua. Un suministro de emergencia garantiza que pueda acceder a recursos esenciales incluso sin electricidad.
Pandemias y brotes de enfermedades: como ha demostrado la pandemia de COVID-19, estos eventos pueden alterar las cadenas de suministro y provocar escasez. Un suministro de emergencia puede ayudar a superar estos períodos críticos.
Emergencias personales: El desempleo, la enfermedad u otras dificultades personales pueden hacer que de repente te quedes sin dinero. Un suministro de emergencia puede ayudar a mantener los suministros básicos en tales situaciones.
Estabilidad de precios: al crear un suministro de emergencia, puede beneficiarse de precios bajos y protegerse contra futuras fluctuaciones de precios.
Autosuficiencia: en caso de crisis o escasez de suministro, es reconfortante saber que tiene sus propios suministros a los que recurrir. Esto promueve un sentimiento de independencia y confianza en uno mismo.
Ayuda para los demás: En caso de una crisis, no sólo puedes sustentarte a ti mismo, sino también a tus vecinos, amigos o familiares recurriendo a tus propios suministros de emergencia.
Prepararse para posibles crisis futuras: el futuro es incierto y es difícil predecir qué desafíos nos esperan. Una reserva de emergencia es una medida proactiva para prepararse para lo inesperado.
Reducir el estrés y el pánico: en situaciones de crisis, las personas pueden entrar en pánico e intentar abastecerse rápidamente. Tener un suministro de emergencia ya puede ayudar a minimizar su respuesta al estrés y tomar decisiones más racionales.
Fomente la organización y la planificación: crear una reserva de emergencia requiere pensar en sus necesidades y en cómo almacenar adecuadamente los alimentos y el agua. Estas habilidades también pueden resultar útiles en otras áreas de la vida.